Traen vida, vibran amor y nos permiten sintonizar y conectar con la energía del Planeta.
Su vibración es de curación, su fuerza elimina energías de dolor, desbloquea y remueve lo que nos lleva al vacío, el apego a situaciones que no nos traen bienestar, nos mueve y nos lleva por un camino de sintonía y elevación espiritual donde nos permite desconectar de cosas y situaciones superfluas que nos impiden crecer, y vienen a enseñarnos a valorar el mundo, la naturaleza, la vida y la importancia de todo lo que se mueve a nuestro alrededor.
Enseñan el amor a la vida, traen alegría y una fuerte energía de gratitud, que nos permite cambiar nuestra vibración y atraer aquello que deseamos de corazón.