La labradorita es una guardiana de la luz espiritual. Actúa fortaleciendo el aura, evitando la pérdida de energía y creando una barrera sutil contra influencias densas o disonantes. Al mismo tempo, aporta estabilidad emocional, ayudando a superar miedos, inseguridades y bloqueos que nos alejan de nuestra verdadera esencia.
Este bastón activa la clarividencia, expande la conciencia y nos conecta con las energías universales de luz y sabiduría. Es profundamente recomendado para meditaciones, canalizaciones, rituales y terapias energéticas, o simplemente para momentos de recogimiento y escucha interior.
La labradorita favorece la iniciación espiritual, despierta la intuición profunda, estimula los dones psíquicos y nos ayuda a alinearnos con nuestro propósito del alma. Es una piedra de revelación, despertar y de reconexión con lo que somos más allá del cuerpo y la mente.
Este bastón tiene algo ancestral. Como si llevara en su interior memorias de otras vidas, de otros planos, de tiempos sagrados, y nos invitara, con suavidad y respeto, a acceder a esa sabiduría antigua.
Para quienes trabajan con la energía — ya sea sanando, canalizando, guiando o simplemente buscando su camino espiritual — este bastón será un compañero fiel y sagrado.
No es un simple cristal. Es un portal.
Un portal hacia tu interior, hacia lo sagrado, hacia lo que está más allá del velo.
Y si él te llama… tal vez sea porque ya estás lista(o) para recordar quién eres, para ver más allá de lo obvio, para entrar en comunión con tu luz interior.
Especificaciones Técnicas :
Sistema cristalino: triclínico
Composición química: Na(AlSi₃O₈)Ca(Al₂Si₂O₈)
Dureza: 6 – 6,5